Mujeres y Obispado: A propósito de Primera a Timoteo: (Women and the Pastorate)

Es común encontrarnos en el contexto latinoamericano con la marginación que se ha hecho de la mujer para ocupar cargos de liderazgo, de manera especial los cargos decisorios - aunque con unas pocas excepciones - en los diferentes ámbitos económicos, políticos y sociales. Esa situación también se vive en las iglesias, especialmente en cuanto al reconocimiento de los oficios pastorales o sacerdotales y especialmente obispales.

La prueba de esta realidad, en la mayoría de las iglesia, es la no ordenación de mujeres al pastorado o al sacerdocio y, como consecuencia, la marginación de ellas de cargos obispales o sus similares en las respectivas comunidades de fe; cargos que tienen que ver con toma de decisiones en cuanto a la orientación y marcha de las correspondientes instituciones eclesiásticas. En este caso, las iglesias han silenciado a las mujeres.

Tal marginación obedece, en gran parte, a un fuerte sistema patriarcal y androcéntrico que domina nuestras sociedades. En el caso de las iglesias, la situación se ha visto reforzada por la lectura de algunos textos bíblicos. Un ejemplo de ello es la Primera Carta a Timoteo donde nos encontramos con una serie de prescripciones dadas por el autor a la comunidad en Éfeso. En medio de todas estas prescripciones es relevante el papel que juegan las mismas contra la mujer, especialmente en cuanto a los cargos de liderazgo dentro de la asamblea cristiana.